Siete engranes metálicos sobrepuestos unos con otros

¿Cómo lubricar engranajes abiertos?

Cuando llega el momento de seleccionar un lubricante para engranes abiertos, además de considerar las condiciones de trabajo y el método de aplicación (rocío, salpicadura, brocha o circulación), una de las propiedades clave para observar es la viscosidad. ¿Por qué? Porque esta puede influir en la vida útil del producto y la de los componentes, el índice de desgaste de los equipos, el consumo de energía, la fluidez y otros factores.

La viscosidad es la resistencia de un fluido al movimiento o deformación causada por el esfuerzo cortante o la fuerza de tracción. A medida que la temperatura aumenta, la viscosidad del lubricante disminuye, y a medida que la temperatura disminuye, la viscosidad aumenta. Por ello, para determinar el lubricante correcto a utilizar, también hay que tener en cuenta su índice de viscosidad.

El índice de viscosidad es un número empírico sin unidades y es una medida del cambio en la viscosidad del aceite en relación con la temperatura. Los lubricantes con un índice de viscosidad alto muestran menos cambios de viscosidad a temperaturas más altas que los que tienen un índice de viscosidad más bajo.

Impacto de la viscosidad en la productividad

Los equipos con engranes abiertos están sujetos a condiciones operativas variables y suelen estar sometidos a una amplia variedad de entornos, muchos de ellos caracterizados por temperaturas extremas. De ahí la importancia de utilizar lubricantes formulados para resistir variaciones de temperatura para que la productividad no se vea afectada.

Si la temperatura del lubricante no es estable, la viscosidad tendrá variaciones y los equipos pueden presentar fallas o funcionar irregularmente, incrementando las posibilidades de presentar desgastes debido a la alteración del espesor de la película lubricante, la cual ayuda a proteger la cara de contacto de los dientes de los engranes.

Igualmente, la viscosidad del lubricante puede cambiar si las moléculas se degradan durante el servicio por efecto de la alta temperatura, así que es importante asegurar que el lubricante que se utilice tenga una alta estabilidad térmica.

Beneficios de los lubricantes de alta viscosidad

Los lubricantes sintéticos Mobil SHC™ Gear 22M y Mobil SHC™ Gear 46M están libres de zinc y plomo y no contienen solventes. La combinación de su alto índice de viscosidad y sistema de aditivos único brinda excepcionales propiedades térmicas y oxidativas. Además, proporciona excelente protección contra el desgaste e inhibición de la herrumbre y de la corrosión, ayudando a mejorar la confiabilidad y el rendimiento de los equipos.

Su ultra alta viscosidad y diseño específico los hace efectivos para utilizarse en engranes abiertos expuestos a condiciones de alta carga y regímenes de lubricación límite. Otra ventaja de utilizarlos es que son transparentes, lo que facilita la inspección de engranes.