La herencia

La Herencia - Una larga historia del desempeño en el automovilismo

 

 

Los aceites de motor Mobil 1 han sido durante mucho tiempo el lubricante elegido para los equipos de carreras que compiten en las categorías de automovilismo más exigentes y populares de todo el mundo.

La historia de Mobil 1 en el automovilismo se remonta a principios de la década de 1970, en las competencias de rallys; sin embargo, nuestra participación en las carreras se hizo más oficial en 1978, a través del patrocinio del equipo Williams de Fórmula 1™ y el patrocinio en 1987 del carro n.º 27 de Rusty Wallace en NASCAR®. A partir de ese momento, la presencia de Mobil 1 en las pistas de carreras y los circuitos ha crecido hasta proporciones mundiales. Hoy en día, el aceite sintético Mobil 1 es solicitado por su capacidad para proporcionar un excepcional desempeño y protección del motor incluso bajo algunas de las condiciones más extremas. Los técnicos automotrices, los pilotos de autos de carreras, los dueños de equipo y los fabricantes de automóviles líderes en el mundo pueden dar fe de la avanzada tecnología que brindan los lubricantes Mobil 1.

Gozamos de la asociación con muchos de los más populares y exitosos equipos de carreras, que incluyen el equipo de Fórmula 1 Red Bull Racing, el equipo Stewart-Haas Racing para el campeonato Monster Energy NASCAR® Cup Series, y muchos otros como Porsche Motorsport, en el que se considera a Mobil 1 un “socio de tecnología oficial” en la cooperación global de todas las actividades de obras subvencionadas, todas las categorías internacionales Carrera Cups y el título de la asociación de Supercopa Porsche Mobil 1 (la categoría individual más rápida del mundo). Mobil 1 es también el aceite de motor oficial de NASCAR® y contribuye al aumento de las iniciativas del automovilismo en todo el mundo.

El automovilismo sigue siendo un elemento clave de nuestro patrimonio y linaje. Seguimos adelante con nuevos avances tecnológicos para mejorar nuestra gama de aceites y lubricantes, impulsados por nuestra propia voluntad de contribuir a un desempeño sobresaliente en la pista, así como en la carretera.